Este tipo de adhesivo tiene un acabado que refleja una gama de colores diferentes, los cuales varían según el ángulo de visión y la luz que incide sobre él. Los colores pueden ir desde tonos metálicos como el azul, verde, rosa, dorado y morado, creando un efecto visual impresionante.
El adhesivo tornasol se utiliza en aplicaciones como etiquetas personalizadas, calcomanías, decoraciones de productos, empaques de edición limitada, artículos de moda y objetos que buscan destacarse con un toque moderno y único. Es ideal para aquellos proyectos que buscan un acabado llamativo y que atraigan la atención por su juego.